Ya hace años que comenzaron a circular por el mercado las mantas de actividades y los móviles. A todos los padres nos regalan estos dos artículos cuando tenemos nuestro primer hijo. Yo recibí una de estas mantas y unos cuantos móviles al nacer mi primera hija y la verdad es que me gustaban mucho; me encantaban los colores, me parecían “juguetes” atractivos y beneficiosos para el desarrollo de mi hija.
Con mi segundo hijo las cosas cambiaron; porque cuando apenas tenía 4 meses, comenzamos a ir regularmente al Gira-sol, allá comprendí el perjuicio que tienen para el desarrollo de la motricidad de los niños las mantitas y los móviles.
Empecemos por las mantitas: El primer inconveniente es que son muy pequeñas, cuando los bebés tienen un mes o dos y se mueven poco podrían servir, sin embargo tienen también el inconveniente de ser sobreestimulantes para bebés tan pequeños. Hay demasiados colores, sonidos y texturas que además no acercan a los pequeños a la naturaleza y a la realidad.
Cuando los pequeños adquieren un poco más de movilidad (girarse, arrastrarse), la manta se queda pequeña pues les impide moverse.
Para resolver la cuestión del espacio, muchas familias (yo fui una de ellas) optamos por comprar unas piezas sintéticas que se montan como un puzzle. En teoría, pretendemos con eso amortiguar los golpes de los bebés, pero la realidad y esto lo tengo comprobado a través de la observación de muchos bebés en Gira-sol, es que los pequeños no necesitan estas cosas porque si siempre están estirados en el suelo es muy pero que muy difícil que se den golpes en la cabeza.
En cuanto a los móviles y gimnasios de actividades: NO SON RECOMENDABLES pues lo más importante, según el trabajo de Emi Pikler, es dejar al bebé el máximo campo de visión posible y poner objetos a su alcance para que pueda cogerlos y explorarlos. Los móviles impiden al bebé ambas cosas pues lo obligan a mirar los objetos que están arriba (visión aérea) saturándolo de colores y formas. Difícilmente puede manipular estos objetos pues no siempre están al alcance de sus manos. Esto puede causarles cierta frustración pues además de obligarlo a mirar siempre las mismas cosas no permitimos que pueda tocarlas, chuparlas, olerlas, en una palabra explorarlas.
Alternativa a todo lo anterior
En Gira-Sol utilizan una alfombra de bambú de 2x1.5m. Esta alfombra no se mueve, transpira, es de fibras naturales y permite al bebé hacer todos los movimientos que desee y después puede utilizarse en casa, no hay que buscar una víctima para colocársela.
Lo mejor es poner cosas naturales: madera, esparto, pañuelos de algodón y siempre colocarlos en los laterales para que el pequeño pueda moverse hacia los lados y coger las cosas.
Por los motivos que hemos expuesto, en Jugar i Jugar no tenemos mantas de actividades ni trípodes ni móviles para bebé.